
Tuesday, August 09, 2005
Ojos tristes
Querido Daniel, no te preguntaré cómo estás ya que considero que teniendo en cuenta la situación actual, cuando uno no está no puede estar de ninguna manera. Te escribo esta carta por necesidad de poder decirle al infinito en el que te encuetras tú lo mucho que te añoro, y que te quiero desde aquel primer dia en el que tus ojos tristes se cruzaron con los mios en aquella lejana tarde de otoño hace más de siete años. Desde entonces no ha habido (ni tampoco creo que lo haya) un solo dia en el que no te haya amado, en el que no haya soñado contigo. Daniel, Daniel.... Se que jamás podré querer a nadie tanto como te he querido a tí; porque aunque ha pasado el tiempo y hemos terminado en puertos diferentes, aún en la soledad de la noche mis labios traidores siguen pronunciando tu nombre. Nunca me han gustado las despedidas así que dejaremos que eso sólo sea un hasta pronto.

Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment